Retos y desafíos de la inteligencia artificial en el ámbito educativo
En tiempos de cuarta revolución industrial o también denominada era de la digitalización, entendida como el nuevo escenario productivo el de la fábrica inteligente, aquella que esta signada por la convergencia de la tecnología física, digital y biológica, surge el fenómeno de las nuevas tecnologías y dentro de ellas, una a recobrado de un tiempo a esta parte significativa importancia y preeminencia por sobre las demás, hacemos referencia a la Inteligencia Artificial (IA).
La Inteligencia Artificial (IA) es una disciplina más que importante en el campo de las ciencias de la computación, especializadas en ofrecer técnicas y programas capaces de simular la inteligencia del comportamiento humano para poder dar solución a problemas en diferentes dominios del conocimiento y una de ellas que es de vital necesidad e interés: la Educación.
En lo que respecta a la importancia de la Inteligencia Artificial (IA) al campo educativo, es que aquella provee elemento de análisis para el diagnóstico cognitivo y personalizado de cada alumno, estilos de aprendizaje, desempeño, perfiles sociopsicológico y motivacionales, entre otros.
Todos estos hallazgos son sin dudas cuestiones puntuales que permite implementar como lo mencionáramos más arriba, modelos de aprendizajes adaptado para cada alumno.
Si bien existen estudios de gran relevancia de destacadas casas de altos estudios a nivel mundial como lo es la Universidad de Stanford, el uso de la Inteligencia Artificial (IA), será cada vez más común en las aulas desde éste tiempo hacia el 2030.
Por ello, y para avanzar en este ensayo sobre la temática en curso es dable resaltar que, la Inteligencia Artificial puede definirse también en otras palabras, como el método para hacer que los dispositivos se comporten de manera inteligente, emulando la inteligencia humana y sus tareas más destacadas como ser: aprendizaje, razonamiento, planeamiento, percepción y comprensión del lenguaje natural.
A lo esbozado precedentemente creo importante agregar el concepto vertido por el periodista Jhon Grover que hace alusión y recalca la función del machine learning, que no es ni más ni menos que: la capacidad de los dispositivos de aprender, inclusive sin la supervisión humana, y mejorar su funcionamiento con base a la experiencia que estos adquieren.
La Inteligencia Artificial (IA), realiza el procesamiento de gran cantidad de datos, más conocido como Big Data o macrodatos mediante métrica y analítica para determinar las obras más reproducidas y más comentadas, así como los datos de cada usuario, creando un Algoritmo que sugiere contenido relacionado con el que el usuario ha demostrado mayor interés.
A raíz de lo explicado ut-supra, a simple vista y análisis pormenorizado, la Inteligencia Artificial (IA) aparece como una herramienta prometedora para el ámbito educativo y creo personalmente que lo será sin dudas especialmente en los procesos de enseñanza y aprendizaje, pero existe aún varios motivos que emiten una alarma inminente con el transcurso del tiempo y la falta aún de una regulación global del ciberespacio que es el ámbito donde transcurren o se lleva adelante el funcionamiento de este tipo de nuevas tecnologías.
Con una mirada tecno-optimista podemos enumerar una serie de beneficios como ser: que el uso de la Inteligencia Artificial (IA) en la educación reducirá las tareas repetitivas, también fomentará la educación personalizada, dará más relevancia al aprendizaje colaborativo, entre otras cualidades.
Pero como recalcamos siempre la falta de regulación del ciberespacio hay otras cuestiones meramente imprescindibles de subsanar, como ser los agentes de software conversacionales inteligentes (chatbot) que impactara de lleno con el área que hoy está en pugna en el ámbito de discusión sobre el trabajo y la automatización, por eso es necesario tener una solución y respuesta adecuada para quienes son el pilar básico de la sociedad en materia educativa (docentes, profesores, etc).
Otra cuestión a tener en cuenta es el análisis exhaustivo del programa ODS 4, que si bien concuerda con un nuevo modelo de orden para la humanidad, nada garantiza que sea en beneficio no solo en el ámbito educativo sino en la humanidad misma, debido a los números retos y desafíos que hay que atravesar, entre ellos el más importante en el ámbito de la Inteligencia Artificial (IA), que es la cuestión Ética, problemática abordada desde el Vaticano.
El Papa Francisco, quien expreso: no es aceptable que la decisión sobre la vida y el destino de un ser humano se confíe a un algoritmo, debido a la profundidad y la aceleración de las transformaciones digitales terminan planteando problemas inesperados, que imponen nuevas condiciones al Ethos individual y colectivo; hasta otros actores como la Comunidad Europea, que en materia de Ética para la Inteligencia Artificial (IA), creo el Plan de Acción de Educación Digital (2021-2027), donde prima el apoyo para la adaptación sostenible y eficaz de los sistemas de educación y formación de los estados miembros a la era digital.
Si bien UNESCO hace un llamamiento intrínseco a adoptar un enfoque en materia de Inteligencia Artificial (IA), donde el centro y eje sea el ser humano mismo, teniendo como objetivos principales: la lucha contra las desigualdades y acceso al saber en pleno siglo XXI, la investigación y diversidad de expresiones culturales, entre otras; también se halla el denominado Consenso de Beijing que tiene como objetivos estratégicos una serie de fines de los cuales no dudamos es en beneficio del ámbito educativo, de los alumnos, profesores, promoviendo ddhh, desarrollo sostenible, y otras.
También la Comisión Europea ha publicado un Plan Coordinando sobre Inteligencia Artificial (IA) con similares fines; en lo que atañe a nuestro país, (Argentina), se trabaja en capacitaciones tanto para docentes y alumnos en “Aprende Programando” (diseño de aplicaciones móviles, videojuegos, drones, robótica, diseño e impresiones 3D, entre otras); amén de ello siguen existiendo por cuestiones esenciales de subsanar, antes mencionadas a los efectos de lograr los fines propuestos por los diversos entes antes mencionados.
Por último, se hace imperioso advertir que, en la nueva educación del siglo XXI, no cabe duda que los avances que se están produciendo a nivel global son realmente importantes, a tal punto que están reinventando la educación, y sobre todo en materia de Inteligencia Artificial (IA), pero esto debe ir indefectiblemente acompañado de un tinte Ético y reglamentario donde existan reglas de juego clara, transparentes, donde esta nueva tecnología constituya un medio transformador para el ser humano en beneficio de éste, y con ello diagramar la nueva modalidad y normalidad educativa que no espera y que hace tiempo debería constituir una política de estado urgente, para construir una verdadera sociedad con modelo futurista sostenible, sustentable e inteligente.
Dr. Mario Ramón Duarte
🔵Abogado y Juez Administrativo;
🔵JUEZ ADM. MUN. FALTAS (SAUCE-CTES.-ARG.)
🔵ESPECIALISTA DER. PUB. CONT. (UCSF)
🔵MIEMBRO DOSSIER GEOPOLITICO INTERNACIONAL (CBA.-ARG.)
🔵COLABORADOR CENEGRI (RJ-BRA)
🔵ESPECIALISTA EN CIBERSEGURIDAD Y CIBERDEFENSA
FUENTES CONSULTADAS
Cuarta Revolución Industrial: análisis estratégicos – Autor: Dr. Mario R. Duarte – Edit: PhillosAcademy (2021 Arg-Bra)
La Inteligencia artificial y el Big data, ¿pueden mejorar la educación?
La educación con inteligencia artificial ya llegó, ¿están los docentes preparados?
EN EL AMBITO EDUCATIVO
