ARGENTINA: PROYECTO DE REGULACION REDES SOCIALES PARA EL BIEN COMÚN

“Para poder afrontar problemas de fondos que no pueden ser resueltos por acciones de países aislados, es indispensable un consenso mundial”.

Ante la urgencia de una regulación global del ciberespacio, temática por demás fundamental, necesaria y obligatoria, aún en proceso, en un mundo 4.0 signado por nuevos postulados y por nuevas tecnologías que son el alma mater de esta nueva era o época de la historia inédita,jamás antes vista por la humanidad; y, donde la vertiginosidad con que transcurren las cosas, entre ellas el tiempo, la vorágine con que vivimos intensamente nuestra cotidianeidad, donde la exponencialidad y disrupción marcan el paso de nuestra realidad, se hace menester, pensar como política de estado urgente en lo que atañe a la cuestión nacional, pero también un llamamiento urgente a los organismos multilaterales para saldar esta deuda, en ambos casos (nacionales e internacionales), a los efectos de contar con normas regulatorias claras y con sentido ético-social-ambiental para el debido uso de las redes sociales, en el nuevo entorno en que nos desarrollamos.

“Una tecnocracia ausente de valores conduce a sociedades con medios, pero sin fines”; por eso se hace inevitable abordar en profundidad, el pacto que se propone el gobierno argentino para el buen uso de las redes sociales, materia pendiente, para tener conciencia de la esencia del mismo, caso contrario, si bien desde el punto de vista personal la tecnología es un vehículo positivo para el avance de la humanidad en diversos aspecto; ninguna cuestión que hace a políticas públicas, si no están debidamente reguladas, y sea usada para el bien común de las personas o de los usuarios que transitan día a día la web, nos hace pensar que se aproveche con un fin benéfico común y transparente.

Este siglo XXI que estamos transitando en los albores de su segunda década, cada vez más caracterizado por el ambiente digital, deja al descubierto múltiples falencias, que deben abordarse con la seriedad y celeridad que ameritan; la proliferación de innumerables flagelos como las fakenews, la deepfake, el grooming, el ciber-bullying, el moobing, el sexting, la deep web, la dark net, los ciberdelitos, entre otras y desde el ámbito doméstico; o como los ciberataques, la ciberseguridad, las guerras cibernéticas, el ciberespionaje, el hacktivismo, entre cuestiones más complejas; son un verdadero inconveniente que van in-crecendo, en diversas regiones del mundo y la nuestra (Latinoamérica) o nuestro país, no es ajeno a ello.

Ahora bien, realizada esta necesaria introducción, contar con una reglamentación de las redes sociales para aplicarlas al uno de los bienes más preciados del ser humano como lo es el Bien Común, “un bien al que aspiran todas las personas, y no existe un sistema ético digno de ese nombre que no contemple el mencionado bien como uno de sus puntos de referencia esenciales” –asevero el Santo Padre Francisco-. Si bien hice una enumeración de flagelos que hoy azotan al ambiente digital a falta de una adecuada regulación, también hay otras cuestiones que su inmediata regulación sean prioridad, como la robótica, la inteligencia artificial, la biotecnología, la automatización, los algoritmos, el big data, la comunicación, entre otras.

Por eso, antes de entrar de lleno en el tema que nos atañe, su importancia estratégica en este nuevo tiempo es de carácter prioritario; pues no debemos olvidar que esta era de la digitalización que cruza a todo el mundo, están en juego ingentes intereses económicos, capaces de realizar formas de control tan sutiles como invasivos, creando mecanismos de manipulación de la conciencia y del proceso democrático, como la hizo recientemente en declaraciones a los medios de información de manera desinteligente un ex presidente argentino arrogándose principios democráticos, afirmando ser “Absolutistade la libertad de expresión” y manifestándose contrario a este pacto regulatorio, lo que marca la  inexperiencia e ignorancia elemental de sus manifestaciones o peor aún, tratar el tema de manera hipócrita o con medias verdades que solo tienen como fin, un interés mezquino, meramente electoralista y para pocos, siendo contrario a los de una comunidad o bien común de nuestra sociedad.

Quien impulsa este tema trascendental y necesario es el Secretario de Asuntos Estratégicos y Presidente del Consejo Económico y Social de nuestro país, el Dr. Gustavo Beliz, quien manifestó con total certeza que este anuncio ayudara a desintoxicar el espíritu de nuestra democracia en el uso de las redes sin la debida regulación. Para un cabal conocimiento de dicho programa es preciso mencionar que se trabaja sobre cuatro puntos fundamentales a saber:

• Un conocimiento profundo del escenario digital actual.
• La construcción de consensos amplios sobre buenas prácticas en internet.
• El establecimiento de acuerdos y compromisos entre múltiples sectores de la sociedad civil en torno a esos consensos.
• La consolidación de un espacio especialistas desde donde pensar, de modo amplio y colectivo, los desafíos de este tiempo.

Esto que expresa el Dr. Gustavo Beliz, estará en línea con la adhesión de la República Argentina, al pacto por la Información y la Democracia, que persigue el objetivo de abordar los múltiples desafíos del ejercicio de la ciudadanía en tiempos de internet. Por último, el también miembrode la Academia Pontificia de Ciencias Sociales Vaticana Dr. Beliz agrego que, el objetivo es aprovechar al máximo el potencial democrático que ofrecen las plataformas virtuales, avanzando hacia la construcción de entornos digitales plurales y respetuosos que favorezcan a la Amistad Social, para hacer frente a los efectos negativos de la desinformación y los discursos de odio.

Además, estas acciones según el funcionario nacional mencionado ut-supra, apuntan a entorno digitales respetuosos que refuercen los valores de: la Responsabilidad, la libertad, la convivencia democrática, la tolerancia y el mayor grado de veracidad en las informaciones; todos estos males que hoy aquejan desafortunadamente a nuestro país y nos enquisto en un mal endémico que es la falta de Amistad Social. Los beneficiarios de este proyecto serán:

• El estado nacional, provincial, municipios.
• Las plataformas de contenido digital.
• Empresas de servicios de comunicación.
• Universidades.
• Dirigencia política, sindical, empresarial y social.
• Autoridades electorales.
• Empresas verificadoras de contenido.

Finalmente, y a modo de conclusión de un tema muy profundo y necesario, que en innumerables oportunidades se le resta la debida importancia, justamente porque no se hace lo que se debe para dar a conocer y hacer comprender a los ciudadanos que estamos ante un nuevo tiempo, una nueva era, una nueva normalidad, que nos exige un nuevo compromiso, nuevas exigencias, y además fraternidad, amistad social, empatía, entre otras tantas y necesarias. Es momento de superar el pensamiento único y entender que con los puños cerrados no se siembra. Parece una utopía, pero no, se abre un tiempo de esperanza contra toda desesperanza, y debemos saber hoy más que nunca que la patria existe. Entonces debemos ser capaces de reconstruir entre todos las cuestiones básicas e imprescindibles de nuestro país para ser artífices necesarios de este nuevo tiempo, el camino es a través del Bien Común, es momento de conjugar la teoría con la praxis, y poniendo reglas claras para formar una sociedad sana, que no solo parte de revoluciones caligráficas, sino artífice de su propio destino.

Fuentes Consultadas:

Eco integración de América Latina: ideas inspiradas en la encíclica Laudato Sí. Autor: BID-INTAL. Edit: INTAL-BID (2017)

ChristusVivit: a los jóvenes y todo el pueblo de Dios. Autor: Papa Francisco. Edit. Ediciones Paulinas. (2019)

Cuarta Revolución Industrial: análisis estratégicos. Autor: Dr. Mario R. Duarte. Edit: PhillosAcademy (2021)

Papa Francisco, «El bien común en la Era Digital»

https://www.telam.com.ar/notas/202203/587917-beliz-anuncio-un-programa-de-lineamientos-del-uso-de-las-redes-sociales-para-el-bien-comun.html